Cuando todo parece que funciona. Aparece el veneno de las palabras, la envidia que al final te hace gritar hasta quedarte sin aire, la tolerancia; que baja más rápido que la temperatura en invierno.
Si opinas te matan. No hace falta sangre para ajustar cuentas. Y me comentan que el corazón se asemeja a cualquier gárgola: de piedra maciza, contra tormentas, siglos, silencios, carcajadas.
Hoy no salvan los sueños, ni las palabras hermosas, ni la buena música. Ni siquiera ellos, ni ella, ni el futuro, quizá solo sepa refugiarme en el pasado.
Y A TODOS OS DIGO, OS GRITO: PERO, CÓMO SE PUEDE SER TAN NECIO.
Si opinas te matan. No hace falta sangre para ajustar cuentas. Y me comentan que el corazón se asemeja a cualquier gárgola: de piedra maciza, contra tormentas, siglos, silencios, carcajadas.
Hoy no salvan los sueños, ni las palabras hermosas, ni la buena música. Ni siquiera ellos, ni ella, ni el futuro, quizá solo sepa refugiarme en el pasado.
Y A TODOS OS DIGO, OS GRITO: PERO, CÓMO SE PUEDE SER TAN NECIO.
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